Con sus 210 kilómetros de costa, Ibiza es la tercera isla en extensión de Baleares, por detrás de Mallorca y Menorca. Los encantos de Ibiza son muchos y no se reducen a sus preciosas calas y playas, ni a sus interminables noches de fiesta y discotecas. Entre los grandes atractivos de la isla se encuentra su embrujo especial, un ambiente místico que se respira en muchos de sus rincones, especialmente durante sus mágicos amaneceres y en la hora bruja del atardecer.
Entre los lugares más hechizantes de esta perla del Mediterráneo destaca el islote de Es Vedrà, enclavado en la Reserva Natural de Es Vedrá, Es Vedranell y els illots de Ponent. Es Vedrà es un pequeño pero imponente islote en forma de escarpado peñón. Con una extensión de apenas 60 hectáreas se sitúa frente a las costas de San José. A pesar de este reducido tamaño, Es Vedrà es el hábitat de más de 150 especies de plantas, de las cuales una docena son endémicas, es decir, solo crecen en este lugar del mundo. Debido a estas singularidades ambientales, el desembarco en Es Vedrà y el resto de islotes de la Reserva Natural está totalmente prohibido salvo con fines científicos.
El impontente aspecto de esta gran roca de 382 metros de altura la ha envuelto en mitos y leyendas desde hace miles de años. ¿Te apetece descubrir algunos de ellos? ¡Quédate hasta el final!
Mitos y Leyendas de Es Vedrà
Es Vedrá, hogar de dioses y sirenas
Ibiza fue una pieza muy apreciada por los diferentes pueblos colonizadores del Mediterráneo. Todos ellos dejaron una importante huella en la isla, empezando por los fenicios y los cartagineses.
Entre las deidades de estos pueblos de comerciantes destacaba Tanit, patrona de Cartago, consorte del dios Baal y diosa de la fertilidad y la guerra. Aunque el culto a esta divinidad estaba extendido por toda la isla, era creencia que su hogar se encontraba en el islote de Es Vedrá, desde donde escuchaba las plegarias de sus devotos seguidores.
También los griegos se establecieron en tierras ibicencas, y con ellos trajeron sus inmortales mitos, muchos de ellos recopilados en las obras del más grande poeta de Occidente: Homero. Fue este ciego aedo el primero en narrar las peripecias de Ulises en La Odisea. Entre las más conocidas se encontraba la de las sirenas, esas pérfidas criaturas mitad mujeres y mitad peces que atraían a los marineros con sus bellos cantos para hundirlos después en las profundidades del mar.
Pues bien, por la descripción que hizo el padre de la literatura occidental en su famoso poema épico, todo parece indicar que estos hermosos monstruos tenían su hogar en Es Vedrá. Así que si navegas cerca de sus costas y escuchas bellas melodías, será mejor que ni te acerques.
Es Vedrá, un lugar de culto para los hippies
Damos un salto de casi 3.000 años y nos situamos en la década prodigiosa, aquellos inolvidables años 60, cuando los hippies extendieron el Florer Power por toda la isla de Ibiza atraídos por su misticismo (y por las playas y el sol, tampoco nos vamos a engañar).
La contemplación de Es Vedrá desde las cercana y maravillosa playa de Sa Pedrera de Cala d´Hort, a la que bautizaron como Atlantis, se convirtió en una de las actividades favoritas de los integrantes de este movimiento cultural, costumbre que aún perdura en la actualidad (todavía quedan muchos hippies en Ibiza, como comprobarás si viajas hasta allí).
Es Vedrá, ¿una base extraterrestre?
Aunque suene a ciencia ficción, la posibilidad de que Es Vedrá sea una base extraterrestre es aceptada a pies juntillas por muchos creyentes en el fenómeno OVNI (y por otros que, sin serlo, han visto cosas un tanto raras en sus inmediaciones).
No son pocos los navegantes que afirman haber notado la presencia de extraños objetos bajo sus embarcaciones, ni tampoco escasean los submarinistas que aseguran haberse topado durante sus inmersiones con luces y ruidos de origen desconocido en el entorno marino del islote.
Pero, sin duda, el episodio OVNI más famoso relacionado con Es Vedrá tuvo lugar en el año 1979, cuando un avión comercial con más de 100 pasajeros a bordo se vio obligado a desviarse de su ruta a la altura del islote y aterrizar en el valenciano aeropuerto de Manises después de que el piloto detectase unas luces de diferentes colores que perseguían al aparato a gran velocidad.
El radar del aeropuerto identificó la presencia de tres objetos luminosos de unos 200 metros de diámetro que desapareció en el momento en el que el avión tomó tierra.
A día de hoy el Caso Manises, como fue bautizado el incidente, sigue siendo el avistamiento OVNI más conocido de la historia de España.
Excursión en barco a Es Vedrà
Ya ves que a este icónico islote ibicenco está sobrado de misterios y leyendas. Aunque no se puede desembarcar por se un espacio natural protegido, siempre puedes disfrutar de su magia desde el Mirador de la Torre de Es Savinar o desde la ya mencionada Sa Pedrera de Cala d´Hort.
Otro plan incluso mejor, es realizar una excursión en barco hasta Es Vedrà, bordeando este mágico islote y casi teniendo la sensación de tocarlo al navegar junto él. Hay varias empresas de excursiones en barco operando en Ibiza, como por ejemplo Excursiones-Ibiza.com, que realiza una excursión de un día completo a Es Vedrà y Formentera, de junio a septiembre, y tiene muy buenas reseñas de sus clientes. Otra opción es alquilar una embarcación para navegar por tu cuenta y bordear sus costas, pero recuerda tener mucho cuidado con los OVNIS y con las sirenas.
Atardecer desde el Mirador de Es Vedrà
Ibiza es conocida por sus mágicos atardeceres, que han cautivado a miles de personas desde hace décadas. Uno de los miradores más espectaculares de la isla se encuentra próximo al pueblo de Es Cubells, perteneciente al municipio de Sant Josep de sa Talaia. A solo 6 kilómetros del pueblo, un espectacular mirador se asoma al vacío a unos 100 metros de altura, justo enfrente de Es Vedrá. En este punto suelen congregarse varias personas al final del día para disfrutar de un espectáculo inigualable.
Las personas más aventureras pueden realizar la corta (pero con cierta dificultad) ruta que conduce a la Torre des Savinar, una torre de vigilancia anticorsaria construida en el siglo XVIII y que se alza a más de 200 metros de altura, con visual directa a Es Vedrá.
Atardecer con vistas a Es Vedrà y a la Península
Si subes hasta la Torre des Savinar y tienes la suerte de hacerlo en un día despejado, es muy probable que seas capaz de ver las montañas de Alicante en el horizonte, debido a su proximidad y a la altura superior a mil metros de algunas de estas montañas, como el Puig Campana o la Serra de Bèrnia. Yo tuve la suerte de contemplar este espectáculo hace unos años, como muestra la siguiente fotografía:
Ruta a la Torre des Savinar
En el siguiente track de wikiloc puedes ver la sencilla ruta para llegar al Mirador de Es Vedrá y la (más complicada) subida hasta la Torre des Savinar:
Atlantis: Sa Pedrera de Cala d’Hort
Si subes hasta la Torre des Savinar, frente a Es Vedrá, podrás ver justo a tus pies la que algunos han apodado como Atlantis, la ciudad perdida. Se trata en realidad de Sa Pedrera de Cala d’Hort, una antigua cantera de piedra tosca situada al nivel del mar. En este caso, la excursión para llegar hasta Atlantis es algo complicada y puede ser peligrosa si no se conoce bien el camino, por lo que mi consejo es reservar tu plaza en esta ruta conducida por un guía local que además te permitirá conocer la fascinante historia de este lugar gracias a sus explicaciones.
Hay que tener en cuenta que todo este tramo del litoral ibicenco es un espacio protegido por sus singulares valores ambientales: la Reserva Natural de Cala d’Hort; así que debes proceder con el máximo respeto y cautela, intentando no alterar este lugar.